Programa sobre discapacidad visual (II)

Aprovecho esta página para dar una serie de consejos fáciles para cuando tratemos con una persona ciega:

·           Muchas personas ciegas están preparadas para caminar solas gracias a su preparación, su instinto y su costumbre. No les impongas tu compañía si no te la han solicitado.

·           Preguntar antes de ofrecer ayuda, el hecho de que una persona tenga una deficiencia visual no debe llevarnos a suponer que necesita de nuestra ayuda.

                                                                                                  

·           No es lo mismo ayudar a alguien a hacer algo, que hacerlo en su lugar.

·           Con el apoyo de tu brazo, el ciego caminará con la misma naturalidad que tú. Bastan pocas indicaciones, sólo los obstáculos en el camino.

·           En los sitios difíciles, basta con que le ofrezcas tu brazo y camines delante. Si tú no tropiezas, él tampoco lo hará.

·           Colocándonos delante de la persona ciega, ofrecerla nuestro brazo para que se agarre a él. Nunca deberemos situarnos detrás de ella y agarrar su brazo, y menos aún su bastón,  para empujarle hacia delante.

·           Cuando quiera sentarse, es necesario  que le aproximemos su mano al respaldo de la silla y decirle que tiene la silla delante de él.

                             

·           En el trato de una persona ciega, podemos prescindir de gestos y ademanes expresivos, inútiles. Ej. Tengo una casa así (señalar con las manos)

·           No levantes la voz. Recuerda que los ciegos suelen oír bien.

·           Las referencias a la visión o la ceguera (ver, mirar, ojos...) no son tabúes cuando se habla con una persona ciega, conocen muy bien sus significado y sus acepciones y sobreentienden.

·           Cuando vayas a saludar a una persona ciega, dándole la mano o un beso, no esperes a que el te la dé, sino adelántate y dáselo tú.

·           Cuando entres a un lugar dónde hay una persona ciega, anúnciate o preséntate.

·           No juegues con una persona ciega al juego tonto de adivinar quién soy.

·           Debemos procurar no dejar obstáculos en el medio como sillas, mochilas, etc. y advertirle de los posibles obstáculos que se puede ir encontrando que no se pueden quitar como mesas, armarios...

·           A través del bastón, las personas ciegas detectan la presencia de obstáculos con la suficiente antelación. 

·           Referente a los perros guías que acompañan a los ciegos, no se le deben molestar porque están trabajando.

                 Carmen  García
               (Maestra de ONCE)